BOHE se fundo en el año 1962 en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón y, desde hace 50 años ocupan el mismo espacio, aunque las instalaciones han ido creciendo a medida que evolucionaba el negocio.

La historia de esta empresa comenzó como una pequeña imprenta que daba servicio de elaboración de estuches para una empresa que terminó siendo adquirida por L’Oreal. “Hoy en día, L’Oreal sigue siendo uno de nuestros clientes de referencia”, cuenta Alejandro García Angulo,  Director General de BOHE.

BOHE ha pasado por tres etapas, la primera fue la de fundación y desarrollo entre dos socios. Después, la dirección paso a manos de una segunda generación en la que entran descendientes y familiares de los fundadores. Y, la más reciente que comienza en 2008, en la que la compañía es adquirida por la empresa dedicada a las artes gráficas Torreangulo.

Torreangulo, que ya había comprado a Suministros Gráficos en 2006 con la intención de diversificar sus actividades hacia el packaging, consolido está compañía con BOHE con el fin de formar una empresa fuerte y con los recursos necesarios para proseguir con éxito en el mercado del packaging de alto valor añadido. “En BOHE nos dedicamos desde el principio a un segmento muy concreto, perfumería, cosmética y parafarmacia”, explica Alejandro García Angulo.

Dentro del packaging somos expertos en productos de alto valor añadido. Para ello contamos con equipamiento especifico y personal especializado con mucha experiencia”, comenta Alejandro García Angulo. “BOHE ha destacado siempre por aportar valor al packaging que precisa nuestro cliente. El sector en el que hoy en día se aprecia mucho esta aportación de valor es el de perfumería y cosmética”

En BOHE trabajan 80 personas que en 2011 ayudaron a que la empresa facturase alrededor de 13 millones de euros. Aún cuando la mayor parte de estas ventas son realizadas en España cabe destacar el paulatino incremento de las mismas fuera del territorio nacional. “En los últimos años se ha realizado un gran esfuerzo comercial en el ámbito de la exportación y los frutos empiezan a recogerse ahora” comenta su Director. La responsabilidad social corporativa y el respeto al medio ambiente son parte fundamental de los procesos de esta empresa y, por ello, cuentan con certificación tanto FSC como PEFC desde 2009.

La evolución tecnológica de los estuches requiere adaptaciones también en el parque de maquinaria. BOHE tiene integrados todos los procesos necesarios para la producción de estuches con la excepción del plastificado que se subcontrata a especialistas en el campo. “Necesitábamos una maquina con una tecnología actual y con más cuerpos. Hasta el momento teníamos maquinas con cinco cuerpos y se nos hacia necesario contar con una prensa de seis cuerpos mas barnizado en línea”, dice Alejandro García Angulo refiriéndose a los motivos para adquirir la Komori Lithrone S40.

La compañía cuenta en su parque de producción con la Komori Lithrone S40 de seis cuerpos más barniz, una Heidelberg de cinco colores, y una Komori adicional de dos cuerpos más barniz. Todas las prensas imprimen con tintas UV.

Tenemos una larga relación con OMC”, cuenta Alejandro García Angulo. “Estamos en una dinámica que nos lleva a tener lo más avanzado en tecnología. Nuestra necesidad de actualizar el parque no es tanto por obsolescencia del equipamiento como por necesidad de estar en la vanguardia tecnológica”.

Realizamos varias pruebas de la prensa y cumplió perfectamente todo el plan de pruebas”, dice Alejandro García Angulo. “Ya contábamos con un historial satisfactorio, tanto de producción como de servicio, con nuestra veterana Komori de dos colores”. La solidez y reconocido prestigio de Komori dentro de la industria de packaging de valor añadido ha llevado al fabricante japonés al liderazgo en la tecnología de impresión UV. Este liderazgo se demuestra en instalaciones como la de BOHE, destinadas a realizar producciones de la más alta calidad y sofisticación técnica.

La experiencia en la respuesta del servicio técnico de OMC a lo largo del tiempo que llevamos trabajando con la Komori más veterana nos da la confianza necesaria para contar con ellos para esta operación”, añade Alejandro García Angulo. “Saber que si hay una incidencia  a las siete de la tarde va a haber respuesta eficiente nos puede estar ahorrando de doce a catorce horas de parada de máquina. Ese servicio lo tenemos en OMC gracias los contratos de mantenimiento que tenemos suscritos”.